Beneficios del gateo

Por CASTILLO ORTIZ TERESA DE JESÚS

Desde que nacemos estamos en constante aprendizaje de forma natural y espontánea, cada etapa por la que el ser humano pasa es única y valiosa.

Cuando se es bebe el descubrimiento del mundo y de si mismo, es la forma en que se adquieren habilidades y capacidades, por tal motivo es de suma importancia estimular al niño en todos los sentidos posibles, pero siempre respetando cada etapa natural de su desarrollo.

Existen prácticas que en lugar de brindar beneficios a los bebés resultan perjudiciales, el desconocer información puede hacer que hagamos lo incorrecto sin ser conscientes de ello. Un gran ejemplo es el uso de la andadera, los padres hacen uso de este aparato pensando que ayudarán al bebé a adquirir una habilidad que el debe aprender de forma natural, por lo tanto, no se están respetando los tiempos en que el cuerpo humano vive sus etapas de desarrollo, además de que se pueden causar lesiones por forzar una postura para la que el cuerpo aun no esta listo, esta práctica hace que una etapa muy importante sea brincada; el gateo.

El gateo se da entre los 6 y 9 meses de edad, es una etapa en el desarrollo motor que aporta múltiples beneficios tanto físicos como cognitivos, siempre y cuando se realice de forma adecuada, el niño deberá desplazarse en cuatro puntos de apoyo y con un patrón contralateral, es decir apoyado en las dos rodillas, las dos manos y avanzando de manera cruzada.

No todos los niños logran el gateo, algunos adoptan ingeniosas formas de desplazamiento, sentados, apoyados en los brazos, rodando su cuerpo etc. Estas formas de desplazamiento carecen de los beneficios del gateo ya que el movimiento cruzado del tren superior e inferior es lo que logra la estimulación cerebral.

A través del gateo el niño ejercita su coordinación motora, coordinación viso-motriz, calcula distancias, aumenta su capacidad de exploración y aprendizaje, es el primer paso a su independencia, el desplazarse hacia aquello que le genera interés produce satisfacción lo cual es muy estimulante.

Son muchos los beneficios del gateo de entre los cuales desatacan los siguientes:

Tonifica los músculos:

En un principio comienzan gateando despacio y titubeante, a medida que lo dominan alcanzan mucha velocidad y desarrollan fuerza, esta práctica ayuda a fortalecer tanto sus músculos como su columna, lo cual lo prepará para la siguiente etapa.

Independencia:

Genera mayor confianza en el bebé al ser capaz de realizar acciones por sí mismo.

Desarrollo de patrón contralateral:

Este patrón de movimiento hace posible el desplazamiento correcto en etapas posteriores.

Conexión interhemisférica:

El movimiento cruzado conecta los hemisferios cerebrales favoreciendo la maduración de funciones cognitivas.

Función visual:

El gatear hará que el niño desarrolle más habilidades en la visión aprende a enfocar a distintas distancias y la relación ojo mano, que es de suma importancia para toda la vida.

Desarrollo táctil:

A través del contacto con diferentes texturas al apoyar las palmas de las manos se esta estimulando el motor fino, lo cal traerá muchos beneficios en lo posterior.

Lenguaje:

Por medio del movimiento el niño desarrolla su capacidad de comunicación al interactuar con su medio.

Equilibrio:

El gateo estimula ayudando a madurar el sistema vestibular encargado del equilibrio.

Lateralización cerebral:

Ayuda a establecer la lateralidad del cerebro, esto es cuando uno de los hemisferios se convierte en dominante lo cual se observará en las siguientes etapas.

Por tales beneficios es el gateo considerado una gran estimulación para el niño, por tanto, es importante apoyar al bebé para que logre un gateo adecuado, ayudándolo con la postura e incitando lo a moverse haciendo uso de juguetes u objetos de su interés.

Si un niño no logra el gateo en su etapa podría o no desarrollar algún problema motor, pero lo más importante es que puede presentar un desarrollo neuropsicológico inmaduro, lo cual se puede reflejar a futuro en dificultades a nivel personal o académico.

El cuerpo humano es sabio, por eso es importante respetar todas y cada una de las etapas, no es necesario forzar al cuerpo a caminar cuando aún no está listo brincar la etapa del gateo seria un error en la crianza, no precipitemos ninguna acción, el bebé se sentará cuando esté listo, gateará cuando esté listo, se pondrá de pie cuando esté listo, solo demos estimulación, vigilancia y acompañamiento para lograr un adecuado desarrollo en el niño.

Referencias:

Piaget, J. (1984). El nivel sensomotor. Madrid España, ed. Morata.
Vayer, L. P. (1964). Organización el esquema corporal. Barcelona España, ed. Científico-médicos.

Diplomado en terapia infantil

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