¿Pueden los pedagogos aplicar pruebas psicológicas o dar terapia?

Juan Daniel Servín Núñez

Hace poco uno de mis estudiantes me preguntaba, ¿los pedagogos pueden aplicar pruebas psicológicas? Este cuestionamiento me hizo reflexionar; ya que desde hace algunos años me dedico a impartir capacitación a psicólogos, pedagogos y terapeutas, miro que otros profesionistas o estudiantes de áreas afines a las ciencias sociales y humanidades se acercan a tomar los cursos, y me pregunté ¿Legalmente cuál es el campo profesional del pedagogo? ¿Será que para lo que están siendo capacitados, no podrán  emplearlo en su campo profesional?  Es necesario mirar que  actualmente se está dando un fenómeno respecto a la competencia del área laboral, se puede observar por la calle, la internet, en los diarios y demás anuncios clasificados, profesionistas que ofrecen servicios de terapia y/o evaluación psicológica etc. Muchos de ellos no tienen la licenciatura en Psicología, sin embargo en la praxis se mira un adecuado desempeño y compromiso profesional. Por lo anterior surgen dudas e inquietudes respecto a la competencia laboral de los especialistas en pedagogía.

Acaso ¿Solo los que cuentan con una licenciatura en psicología, pueden aplicar pruebas psicológicas? ¿Será que solo los psicólogos pueden ofertar servicios de terapia? Y si esto es legalmente correcto, entonces ¿Por qué la psicología tiene varias especialidades? En mi praxis terapéutica he observado a un sinfín de licenciados en psicología general, ofertando servicios de terapia, psicólogos educativos, psicólogos sociales etc. Me vuelvo a preguntar: ¿Por qué el pedagogo no?

Debajo del profesionista hay una persona, y ¿si ésta se compromete profesionalmente y se capacita al respecto, no podrá ofrecer servicios afines a los que ofertaría un psicólogo clínico? Yo opino que lo anterior es posible, ambas profesiones retoman elementos del área humanística, epistemológica y psicológica. A partir del presente artículo pretendo  mostrar como el campo pedagógico, que muchas ocasiones ha sido fuertemente devaluado y desfigurado, por el desconocimiento que existe con respecto a sus áreas de desarrollo profesional; el campo pedagógico, por su propia naturaleza y objeto de estudio, cuenta con una amplia gama de posibilidades de acción profesional.

De acuerdo con (Pontón,2002), la pedagogía es la disciplina que se ocupa de reflexionar, intervenir e interpretar lo educativo, entendido como un campo de conocimiento que se dedica al estudio de la formación humana. La pedagogía es la teoría, la disciplina que reflexiona sobre la educación, la guía, orienta y ayuda a la práctica.

En México existen muchos programas formativos que establecen  los elementos profesionales a los pedagogos sin embargo si retomamos los perfiles de Egreso de algunas universidades [1] podemos encontrar las siguientes características:

Conocimientos sobre el hecho educativo. Analizar y comparar diversas teorías, el diseño y evaluación del proceso de enseñanza aprendizaje, diseño, implementación y evaluación del currículo en entornos presenciales y virtuales.

Habilidades. Capacidad para desarrollar investigación educativa en los campos teórico metodológico de la pedagogía. Realizar evaluaciones psicopedagógicas y orientar educativa y laboralmente a niños, adolescentes y adultos. Desarrollo de recursos pedagógicos mediante la tecnología. Capacidad para construir propuestas pedagógicas de innovación. Gestionar, dirigir centros educativos y organizaciones de la sociedad civil. Ejercer la docencia y la capacitación orientadas a la promoción de la persona.

Actitudes. Liderazgo. Curiosidad científica. Visión multidisciplinaria, interdisciplinaria y transdisciplinaria. Visión humanista para incidir en los hechos educativos Actitud emprendedora. Diversos valores como dignidad, libertad, honestidad, justicia. Responsabilidad ética. Toma de decisiones asertivas. Diálogo con la diversidad. Aptitud para participar en proyectos educativos y organizacionales.

Con base en estos perfiles podemos ver como la formación del pedagogo ahora está más encaminada a un saber hacer,  El quehacer profesional del pedagogo surge a raíz de las necesidades que se encuentran en el ámbito educativo y en relación con su función, que consiste en la transformación integral y positiva del sujeto en su proceso de formación. Sin embargo es común que el pedagogo hoy en día se encuentre en una crisis de tipo laboral ya que su campo de acción es muy amplio y poco específico. Por otra parte también compite con otros profesionistas como los psicólogos o los docentes.

De acuerdo a los perfiles ocupacionales de pedagogos,  orientadores  educativos  y  otros  especialistas  en ciencias educativas que propone el Conocer[2] La conformación de las competencias identificadas para este grupo unitario, marca como esencial el  manejo  de  conocimientos  en  procesos  de  enseñanza  y  aprendizaje  o  capacitación  a  otras personas y el manejo de información confidencial, además de la atención  al público y relaciones públicas.

El proceso terapéutico es también un proceso educativo personal, un especio de re-aprendizaje del consultante consigo mismo guiado por un terapeuta, debe ser confidencial, bajo estos argumentos, el pedagogo, de acuerdo a su perfil profesional puede adiestrarse o capacitarse en las áreas psicológicas para poder también fungir como terapeuta y evaluador, no debemos olvidar que la mayor parte de los trastornos del desarrollo infantil se dan en el contexto escolar, siendo el pedagogo el profesionista pertinente para la intervención y evaluación.

En conclusión, los profesionistas de la pedagogía pueden aplicar e interpretar pruebas y test psicológicos siempre y cuando la evaluación sea en el contexto de lo educativo, sin embargo pueden adiestrarse y capacitarse para la aplicación de pruebas psicológicas inclusive, previa capacitación podrán conducir un proceso terapéutico de niños, adolescentes o adultos.

Tal y como lo menciona el Conocer, los profesionales de la pedagogía pueden hacer estudios de postgrado en áreas de la psicología o pedagogía lo que podrá facultarles aún más para participar en las áreas de la salud mental y psicológica.

 

[1] Universidad Popular autónoma del Estado de Puebla, Universidad Anáhuac, Universidad Panamericana, Universidad Nacional Autónoma de México

[2] El Consejo Nacional de Normalización y Certificación de Competencias Laborales (CONOCER) es una entidad paraestatal del gobierno federal mexicano, sectorizada en la Secretaría de Educación Pública y encargada de promover el Sistema Nacional de Competencias para contribuir a la competitividad económica, al desarrollo educativo y al progreso social de México, con base en el fortalecimiento del capital humano.

Rererencia:

Pontón, C. (2002). “Constitución conceptual de la Educación como objeto de estudio y su impacto en la formación de profesionales de la educación”, Perfiles educativos, año/ vol. XXIV, núm. 97-98. México: UNAM, pp. 117-126

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