Los terapeutas sabemos claramente que el objetivo primordial de la psicoterapia es el crecimiento psico-emocional, el hacerse cargo y la toma de decisiones consientes. Sin embargo en el ejercicio profesional de la psicoterapia,  suelen ser  pocos los consultantes que acuden a visitarnos teniendo claros los propósitos esenciales del proceso psicoterapéutico. La mayoría de ellos solicitan una consulta para resolver alguna situación que les está rebasando, una crisis, su tormenta personal en su vaso de agua.

Lo curioso es que muchos de nosotros, los profesionales de la Psicoterapia, nos enganchamos con la crisis del consultante, pretendiendo aliviar su dolencia (Psiquica, emocional y/o psicológica) con un conjunto de técnicas o ejercicios terapéuticos, generando la falsa creencia que el éxito o fracaso del tratamiento está supeditado a la solución de la crisis (motivo de consulta). A decir verdad, nadie pagaría por nuestros servicios sin que el motivo de consulta quede solucionado, sin embargo éste solo puede ser corregido a la luz del crecimiento psico-emocional del consultante,  acompañado por el psicoterapeuta.

Es común encontrar en los foros web especializados y en redes sociales a diversos colegas solicitando materiales de lectura o guías de actuación para ofrecer a sus consultantes una gama de posibilidades terapéuticas. Bajo esta línea me pareció interesante compartir con la comunidad un breve texto que encontré, donde el autor Alfredo Moffatt nos comparte un esquema técnico de actuación en la terapia de crisis, comienza describiendo las cuatro etapas del proceso terapéutico y nos muestra diversas técnicas de intervención.

Espero que el material pueda aportar ideas para integrar a tu consulta, no sería deseable que se tome como un protocolo de actuación paso a paso.

Sería fabuloso que compartas tus comentarios en la parte de abajo, seguramente con esta guía surgirán ideas para potenciar el trabajo terapéutico, compártelas con la comunidad por favor.

Att. Daniel Servín